Joaquín Sánchez Vallés enfrenta intelectualmente a un escritor, Abilio, y un “retirado” profesor de estética de Deusto en esta novela corta. El segundo, un “jomelés” comienza a acudir a las presentaciones de sus libros y debate de filosofía con la audiencia. Poco a poco, Anselmo, que así se llama el vagabundo, se va introduciendo en la vida de Abilio.